Nuevos públicos

laboratorio 1

En / Público

Este primer laboratorio partió de la premisa que para el desarrollo de audiencias es importante implicar al público en una experiencia artística. Reunió a la a red de jóvenes del suroccidente de Barranquilla, al artista sonoro y visual Jorge Haro y artistas locales.


El laboratorio se diseñó en conjunto con la comunidad a partir de sus intereses y experiencias.


Escogimos cuatro micro-talleres:

a. Taller de microhistorias con medios portátiles
b. Taller de Sampling y composición rítmica
c. Taller de construcción de instrumentos
d. Taller de paisaje sonoro.


Los resultados de los micro-talleres se integraron en una puesta en escena final que fue ejecutada por la misma comunidad en el espacio público.

laboratorio 2

Museo Público

Este laboratorio de creación fue un experimento con el público. Fue dirigido por Estudio Mapping,  que propuso una mirada del museo desde la perspectiva de los visitantes. Esto a través de una serie de exposiciones creadas por los usuarios de los museos Casa Museo Julio Flórez y el Museo Arqueológico de Galapa, en el departamento del Atlántico.


El objetivo del laboratorio era que los participantes adquirieran nociones básicas de curaduría y museografía para la creación de un proyecto expositivo. Los contenidos fueron ofrecidos en una serie de micro talleres donde se dieron las herramientas necesarias. Además, a partir de una curaduría de objetos cotidianos desarrollamos dos exposiciones: Usiacurí: Objeto de historias y Máscaras de Galapa: Tradición y oficio.


El laboratorio generó conocimiento sobre el funcionamiento de los museos y de su importancia dentro de la cultura y el contexto en el que se encuentran. Así activamos la relación de las comunidades con los museos y potenciamos la formación de nuevos públicos.

laboratorio 3

Ciudad Jardín

Haciendo uso de una convocatoria digital, este tercer laboratorio se proponía crear un espectáculo participativo para reflexionar sobre los conceptos de espacio público y participación. Fue por la artista española Merche Blasco quien realizó un performance participativo con un grupo de artistas locales y público general, que atendió a la convocatoria.



Se llevó a cabo la instalación de una matriz de sensores en un espacio público (jardín) y también  la exploración que realizaron los participantes en el espacio con linternas y sensores. A partir de esto se creó un paisaje sonoro en constante permutación. De las plantas emergieron grabaciones de campo que la artista  lleva realizando en los últimos 10 años en diferentes partes del mundo. Se logró recontextualizar y establecer un diálogo entre la sonoridad de Barranquilla y la de todos esos lugares a través de la participación de sus habitantes.