La magia de las palabras

La magia de las palabras

 

Texto por: María Dennys Cepeda


Cada vez que leemos en voz alta a un niño, no solo compartimos historias; estamos construyendo los cimientos sobre los cuales ellos, poco a poco, aprenderán a descifrar las letras, a unir sonidos, a dar sentido al lenguaje escrito. La literatura infantil, cuando se ofrece de manera temprana y amorosa, no solo nutre la imaginación, sino que también siembra las habilidades fonológicas esenciales para aprender a leer.

En el maravilloso proceso de la alfabetización, las habilidades fonológicas, como reconocer los sonidos de las palabras, dividirlas en sílabas o identificar rimas, son piedras angulares. Y la literatura, en especial en la etapa preescolar, es una de las herramientas más poderosas para desarrollarlas de forma natural, divertida y profunda.

La literatura infantil es una puerta de entrada al lenguaje. Desde muy pequeños, los niños se fascinan con los sonidos de las palabras. Los cuentos rimados, las canciones y los juegos de palabras capturan su atención de una manera única. La literatura infantil, especialmente la escrita para preescolares, está repleta de recursos sonoros: repeticiones, aliteraciones, onomatopeyas y rimas que invitan a los niños a jugar con los sonidos, a disfrutarlos y a explorarlos.

Cuando un niño escucha un poema o un cuento en voz alta, comienza a percibir que las palabras tienen ritmo, que suenan de formas particulares y que están formadas por partes más pequeñas. Esta conciencia sonora es el primer paso para el desarrollo de habilidades fonológicas, que más adelante serán fundamentales para el aprendizaje de la lectura y la escritura.

 

La literatura infantil, cuando se ofrece de manera temprana y amorosa, no solo nutre la imaginación, sino que también siembra las habilidades fonológicas esenciales para aprender a leer.

La conciencia fonológica es clave en el aprendizaje lector, ya que desarrolla la capacidad de reconocer y manipular los sonidos del habla. Un niño que puede identificar que “gato” y “pato” riman, o que puede dividir la palabra “mesa” en sílabas /me/-/sa/, o puede dividir la palabra “sol” en sus sonidos /s/-/o/-/l/, está desarrollando una habilidad crítica para decodificar palabras escritas en el futuro.

Investigaciones en educación inicial han demostrado que los niños que ingresan a la primaria con una sólida conciencia fonológica aprenden a leer con mayor facilidad y confianza. Y esta conciencia no se adquiere de manera automática: necesita ser estimulada a través de experiencias significativas con el lenguaje, como las que proporciona la literatura infantil.

El mejor entorno para fomentar la conciencia fonológica es un entorno rico en lenguaje, en historias y juegos sonoros. Los cuentos con estructuras repetitivas y predecibles, como “La oruga muy hambrienta” de Eric Carle o “¿A qué sabe la luna?” de Michael Grejniec, ofrecen oportunidades ideales para que los niños anticipen y jueguen con el lenguaje.

Las rimas tienen un papel protagónico. Libros como “De la cabeza a los pies” de Eric Carle o “Rimas de sol, rimas de luna” de Antonio Rubio y Óscar Villán enseñan a los niños a reconocer patrones sonoros, a esperar y disfrutar el juego de los sonidos finales, y a producir sus propias rimas, lo cual fortalece su conciencia fonológica de forma lúdica.

Los juegos de palabras, las canciones tradicionales y las adivinanzas también son formas maravillosas de acercar a los niños a la magia del lenguaje, ayudándolos a discriminar sonidos, identificar sílabas iniciales y finales, y comenzar a segmentar y manipular palabras de manera consciente.

Cada cuento leído en voz alta, cada rima cantada, cada juego de palabras compartido es un paso más en el camino hacia la lectura. Es un regalo que no solo abre la puerta del conocimiento, sino que también enriquece la sensibilidad, la creatividad y el pensamiento de los niños.

 

Barranquilla es Leer

Barranquilla es Leer es el programa de acompañamiento a docentes de las Instituciones educativas distritales, desde la literatura, de la Secretaría de Educación del Distrito de Barranquilla (SED) y la Fundación Círculo Abierto (FCA).

El programa trabaja con niñas y niños de las IED de Barranquilla, elegidas bajo los criterios de la SED, en la experiencia de la lectura y la escritura, en una inmersión en la literatura compuesta por clubes de lectura especializados con artistas, acceso a una biblioteca digital de literatura infantil y juvenil, asistencia a foros de apreciación de literatura con personas expertas en literatura infantil y juvenil, tutorías semanales con niñas y niños

 

Sobre la Fundación Círculo Abierto

La Fundación Círculo Abierto trabaja desde el año 2010 en el diseño y ejecución de proyectos relacionados con educación y cultura. Su confianza en el lenguaje de las artes para construir y comunicar conocimiento ha sido el eje común de las experiencias que desarrolla con artistas tradicionales, contemporáneos, locales, nacionales, internacionales y comunidades diversas del territorio colombiano.

No Comments

Post A Comment