Cornelia en el espejo y la fotografía

 

Texto por Anarel García, promotora de lectura de la Fundación Círculo Abierto

La narrativa de Silvina Ocampo nos permite conversar de un amplio número de temas que abarcan desde la muerte, la sexualidad hasta el auto-concepto y la belleza. Pero la fotografía, la idea del retrato que atrapa un momento vivido, un poco de nuestra alma, se refleja de forma modesta en los distintos espacios del libro Cornelia frente al espejo.

En algún momento Cortázar argumentaba que existe una relación entre el cuentista y el fotógrafo, puesto que ambos se encuentran envueltos en la idea de que debían “recortar un fragmento de la realidad”. En este sentido, Ocampo vive siempre en el límite dentro de sus propios cuentos. En cada uno de estos, una fotografía se asoma entre los cajones, adorna alguna pared, recibe la mirada curiosa de un personaje o conmemora los tiempos felices.

En el cuento El mi, el si o el la, una fotografía simboliza un poco de realidad, un recuerdo de un deseo: “En la casa de su bisabuela había una fotografía de María Barrientos, de quien le contaban la biografía, pero ella quería parecerse a Maggy Taite, de quien había oído un disco inolvidable.” Asimismo, la fotografía como como elemento testigo del tiempo, sucede en El piano incendiado: “Empecé por las fotografías: eran de 1950. Las miré con horror, luego me conmovieron (…) La foto de mi abuela, tan famosa por su belleza, no tenía belleza alguna para mi gusto.  (…) La foto de papá era horrible, con esas manchas de humedad que lo afeaban; la de mamá, en cambio, era tan preciosa que durante media hora la miré atentamente, sin sacar los ojos de encima.” 

 

 

Se podría decir también, que la fotografía como elemento testigo de la belleza, vida y muerte en Ocho alas: “El ignorante miró en silencio la fotografía, pero nadie supo que dentro de ese cuerpo algo más que la vida yacía” o como elementos de caos y orden en Intente salvar a Dios: “Como ninguno de los creyentes es capaz de poner orden en un cajón, libros, lápices, horquillas, peines, cepillo, alicates, fotografías, todo confundido, yo no puedo poner orden en el universo”.

Aunque también, la fotografía como identidad en La nave: «Sólo encontré una fotografía de mi cara. ¿Sería realmente mi cara o la de otra persona?»

La fotografía captura un poco de la escena de cada historia y nos muestra que hay mucho más de lo que señalan las palabras. Sin embargo, no se podría resumir la habilidad de convivir con el límite a través únicamente de la fotografía, puesto que el retrato se asoma como elemento esencial en el cuento Los retratos apócrifos: “El retrato como característica de Ocampo. como pintora y al mismo tiempo, como herramienta que atrapa belleza; una belleza de la mano que la crea.”

Quizá la existencia constante de una foto dentro de la narrativa de Ocampo, no era otra cosa que pequeños fragmentos de memoria, porque una fotografía al final, es como un baúl que atesora una experiencia, que ilustra un día y una hora. O simplemente, es una fascinación por una mano hábil y un ojo entrenado para recortar fragmentos de la realidad.

 

Entre libros

Entre Libros es el programa de acompañamiento a docentes de las Instituciones educativas distritales, desde la literatura, de la Secretaría de Educación del Distrito de Barranquilla (SED) y la Fundación Círculo Abierto (FCA).

El programa trabaja con niñas y niños de las IED de Barranquilla, elegidas bajo los criterios de la SED, en la experiencia de la lectura y la escritura, en una inmersión en la literatura compuesta por clubes de lectura especializados con artistas, acceso a una biblioteca digital de literatura infantil y juvenil, asistencia a foros de apreciación de literatura con personas expertas en literatura infantil y juvenil, tutorías semanales con niñas y niños y un PodCast semanal de literatura que se irradia por Vokaribe 89,6 FM en Barranquilla y se puede escuchar en las redes de la SED y el SoundCloud de Círculo Abierto.

Sobre la Fundación Círculo Abierto

La Fundación Círculo Abierto trabaja desde el año 2010 en el diseño y ejecución de proyectos relacionados con educación y cultura. Su confianza en el lenguaje de las artes para construir y comunicar conocimiento ha sido el eje común de las experiencias que desarrolla con artistas tradicionales, contemporáneos, locales, nacionales, internacionales y comunidades diversas del territorio colombiano.

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